¿y si de repente callamos el tiempo,
en el rincón de las horas incompletas?

porque pretendo disfrutarte los ojos, amor
hacer míos los contornos de tu boca
en un mundo sin testigos
ni esperanzas holgadas por plazos.

porque anhelo llegar a la cima de tu cintura
lanzar bandera blanca a mis defensas vencidas
atarme a la sentencia que designes
sin apelaciones, decretos medias tintas

porque ansío explorar tu aliento sin escalas
y perdida en el secreto del delirio
liberar las reglas a tu trampa

porque busco llevarme de tu cuerpo cada espacio,
y en el acto egoísta de soñar certezas
hacerte cielo inmediato de mis besos inconfesos

porque quiero trazarte la luna en el aura de tu ombligo
y en el lapso entrelazado de ese néctar
sellar tu piel plegaria con mi rezo de fuego

 

lenya